El Grupo Plastek
Envasado de alimentos a medida
La industria alimentaria requiere amplias soluciones de envasado que se adapten a la gran variedad de productos disponibles. Los fabricantes de alimentos necesitan envases que sean seguros y protejan los artículos para que no se estropeen. Las soluciones de envasado también pueden ayudar a que estos productos destaquen en los estantes. El Grupo Plastek puede ayudar a su empresa a crear envases innovadores para una amplia gama de productos.
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Tipos de envases de plástico para alimentos y bebidas
Los envases alimentarios ofrecen una versátil selección de soluciones. Los tipos de envases alimentarios más populares son:
- Bandejas: Las bandejas de plástico son una opción de envasado típica para comidas congeladas y alimentos de una sola ración. Estas bandejas rígidas son fáciles de usar para los consumidores, ya que se pueden meter en el microondas, se almacenan planas o compactas y, en algunos casos, son reutilizables.
- Tarros: Utilice los tarros como solución de envasado de alimentos secos para mantener frescos los productos de su interior. Los tarros también se suelen utilizar para alimentos que se almacenan en un líquido, como encurtidos, aceitunas y cerezas.
- Contenedores y cubetas: Los contenedores y las tarrinas suelen tener tapas a presión y se presentan en una amplia gama de formas y tamaños. Estas soluciones de envasado son habituales para charcutería, productos para untar, productos secos, productos lácteos y otros. Las tapas a presión ofrecen un cierre seguro para mantener frescos los alimentos.
- Botellas: Las botellas de plástico son envases populares para salsas y condimentos, como ranch, ketchup, condimentos y mucho más. Con los cierres flip-top, puede estar seguro de que estos condimentos pueden utilizarse con total control.
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Cómo elegir los envases alimentarios
Elegir el envase alimentario adecuado para sus productos requiere algunas consideraciones. Piense en los siguientes factores:
- Naturaleza del producto: Comprender la naturaleza de su producto ayuda a identificar qué envase funcionará mejor para sus consumidores. Por ejemplo, los productos untables como la mantequilla o el queso fresco necesitan envases de boca ancha, que faciliten el raspado con un cuchillo para mantequilla.
- Tamaño: ¿Qué cantidad de producto desea el consumidor? Por ejemplo, es probable que un comprador quiera tamaños más grandes de helado que de crema agria. También hay que tener en cuenta el coste del producto, el tamaño de las porciones adecuado para el consumo puntual frente a la vida útil y el estilo de envasado que hará más accesible el alimento. Por eso, productos como el caviar suelen venderse en tarros más pequeños.
- La forma: Los clientes almacenan los alimentos en armarios y frigoríficos, y la forma influye en esta parte de la experiencia del usuario. Hay que tener en cuenta cómo se almacenará un envase con una forma determinada. ¿Cabrá fácilmente en un frigorífico o congelador? También puede pensar en la forma en términos de marca. Las diferentes formas transmiten distintos mensajes, y puede utilizar estas opciones para alinearse con su marca.